Tipo: Casa de playa
Año: 2019
Ubicación: Condominio Alto Lobos, Punta de Lobos, Pichilemu
Área: 230 m2
Arquitecto colaborador: Javier Lorenzo
Estructura: Alberto Ramírez
Ingenieros Especialistas: Dycip
Premios: Seleccion XVII Bienal Internacional de Arquitectura de Buenos Aires 2019
El Referente y el Orden
La vivienda nace de un referente proveniente de la anatomía de un coral, donde un cuerpo se ramifica en 4 en búsqueda de la luz y las vistas, este es el orden de la casa. En corte, estos cuerpos se trabajan con distintas alturas.
Estructura
El proyecto, propone una vivienda separada del suelo, específicamente a 2,5 m del nivel terreno natural, se estructura en 2 niveles, el primero con pilares, vigas y diagonales de arriostramiento, pensado para en un futuro dar cabida a nuevos recintos a medida que la familia va creciendo. El segundo nivel se compone de 1 cuerpo ramificado en 4 cuerpos que se abren para aumentar las vistas panorámicas lejanas. El espacio principal se estructura con cerchas y pilares armados en madera como un galpón. Los cuerpos de los dormitorios se estructuran con tabiquería tradicional y el cuerpo de la terraza con un conjunto de maderas tejidas que forman palillajes estructurales.
Master Plan
El emplazamiento reconoce variables climáticas y geográficas, se orienta para optimizar las vistas hacia el mar, maximizar la luz solar norte y protección del viento sur. La vivienda se ubica en una privilegiada ladera oeste de la cordillera de la costa en la zona de Punta de Lobos, Pichilemu, a 3 horas de Santiago.